Se trata de la ejecución del edificio que mejorará las condiciones de los locatarios de la caleta de Coquimbo.

A la espera que Contraloría General de la República dé la última aprobación para licitar obras en el Mercado del Mar, está el alcalde de Coquimbo Marcelo Pereira.

La autoridad dijo a Diario LA REGIÓN, que terminar la obra ha sido una de sus prioridades de su mandato.

Recordó que la revisión de bases de licitación para proyectos municipales por parte de Contraloría, fue estipulado en su mandato con un convenio entre ambas instituciones.

“Hay que despejar algunas dudas de la comunidad, porque la gente aún no tiene en perspectiva lo importante de tener este convenio con Contraloría. Este convenio le da seguridad a los coquimbanos que todo procedimiento del municipio se está realizando con todas las de la ley”.

En cuanto a la aprobación de las bases para reanudar la construcción del Mercado del Mar, explicó que efectivamente ya está en el último trámite en el ente contralor.

“En el primer semestre del año se mandaron las bases del Mercado del Mar y ahora son revisadas para que estén apegadas a derecho. Esperamos que ahora la Contraloría las apruebe, para que, con esa aprobación, subir la bases de licitación al portal de Internet de compras públicas del gobierno, (Chilecompra), las que se mantienen por un mes arriba. Este proceso es así para todas las licitaciones, no se hace en dos semanas como muchos creen”.

Con las bases aprobadas, agrega, vendrá la licitación en las que mediante el puntaje que alcancen cada una de las empresas que postularon, veremos la que será la adjudicada. Y esa información la envían nuevamente a Contraloría, para que diga si esa adjudicación está en regla y con esa nueva aprobación, informan qué constructora ganó el contrato para terminar la construcción.

“Si bien las revisiones de Contraloría ralentizan un poco los procesos, al final tener su aprobación, nos da gran tranquilidad que todo se hizo de forma legal, con transparencia, para mostrar que aquí hay manos limpias y por esto muchos colegas alcaldes, me dijeron que hacer el convenio era como dispararse en los zapatos, pero trabajar unido a Contraloría es lo mejor que puede hacer un alcalde”.

Pereira recordó que si bien todo depende de la respuesta de Contraloría, la adjudicación del contrato podría ser realizada a fines de año o inicios del 2019. “Ahora nuestros departamentos municipales están analizando las propuestas de dos empresas que están postulando y ahí como dije, viene otra revisión final de Contraloría, la que podría demorar unos 30 días”.

Las nuevas bases exigen a las constructoras contar con respaldo económico suficiente y experiencia en ejecución de obras estatales para impedir que no cumpla con el contrato tal y como corrió con INDICO la constructora original del Mercado del Mar, con base en la Quinta Región la que por problemas financieros no pudo terminar el edificio.

“A fines de mi primer año de mandato me encuentro con que la empresa que se adjudicó el contrato del Mercado, durante el período del alcalde anterior, el cual tampoco tiene la culpa de lo que pasó, no pudo terminar, porque no tenía la espalda financiera para terminarlo y si seguía laborando con problema iba a terminar convirtiendo al edificio en un elefante blanco. Por eso me hice asesorar por nuestros profesionales con gran experiencia como el Director de Obras y nuestros abogados, con los que determinamos que era mejor relicitar, que es lo que estamos haciendo para lo que incluimos en estas bases que las constructoras postulantes tuvieran respaldo financiero y un currículum de obras ejecutadas comprobables, que es lo que da mayor confianza, para que prontamente tengamos finalmente el Mercado del Mar, que es lo que nuestra gente y nuestros comerciantes de la comuna requieren”.

Previo a iniciar el estudio de las nuevas bases de licitación, Controloría hizo saber una serie de conclusiones tras un inspección en abril.

Es así que en su parte principal, las conclusiones indicaron que la superficie construida tuvo un aumento respecto al plano original que definía construir en una superficie de 5.532 metros cuadrados, comprobando que el terreno intervenido abarca en la actualidad 13.500 metros cuadrados.

Estableció que de los 13.500 metros cuadrados, 7.300 metros cuadrados corresponden a un terreno de propiedad fiscal, sumando un espacio de 5.200 metros cuadrados de propiedad municipal, junto a un terreno de 915 metros cuadrados de concesión marítima, además el ente contralor señaló que en los 13.500 metros del nuevo espacio utilizado fueron agregados otros 5 mil metros cuadrados que estaban fuera del Plan Regulador comunal.

Para usar esa superficie fue requerido a la municipalidad solicitar los permisos respectivos al Servicio de Vivienda y Urbanismo, Serviu y al Servicio Agrícola y Ganadero SAG, para poder utilizar ese espacio que corresponde a zona rural según el Plan Regulador.

También se consigna que no estaba el permiso de construcción del dueño del terreno, que corresponde a la Empresa Puerto Coquimbo, Epco, ni la evaluación de impacto ambiental del Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental, Seta, por estar fuera del Plan Regulador, todo lo que ya fue resuelto.