El Gobierno argentino dio un paso en su plan de incrementar los controles migratorios al crear la Comisión Nacional de Fronteras, que tendrá por objetivo “establecer una estrategia integral de lucha contra el narcotráfico, la trata de personas, el contrabando y otros delitos transnacionales”.

La nueva medida se suma a la puesta en marcha del sistema de Información Anticipada de Pasajeros (API) en aviones y cruceros, que busca restringir el ingreso al país de extranjeros con antecedentes penales y acelerar la salida de aquellos que sean condenados por delinquir.

La Comisión Nacional de Fronteras funcionará en el ámbito de la Jefatura de Gabinete, “a fin de armonizar su funcionamiento desde una perspectiva interministerial que aumente la integración fronteriza, facilite el tránsito de personas, agilice el comercio internacional y prevenga el delito transnacional”, según establece el  Decreto 68/2017 publicado este jueves en el Boletín Oficial.

El objetivo del organismo será la de actuar como “regulador y coordinador del funcionamiento de los pasos internacionales y centros de frontera”.

Entre las funciones de la nueva comisión se destacan “establecer las normas, sistemas y procedimientos técnicos requeridos para administrar, conservar y mantener los pasos internacionales y centros de frontera y controlar su cumplimiento”.

También “coordinar las actividades de los organismos de control fronterizo en pasos internacionales y centros de frontera, procurando el eficiente desempeño y la integración de las funciones específicas que corresponden a cada uno de ellos en pos de un mejor control fronterizo”.

De acuerdo al Decreto -que lleva las firmas del presidente Mauricio Macri, el jefe de Gabinete, Marcos Peña; y los ministros Patricia Bullrich (Seguridad) y Rogelio Frigerio (Interior)-, la seguridad en los puntos fronterizos será responsabilidad de la Gendarmería Nacional y de la Prefectura Naval, mientras que el Departamento Interpol de la Policía Federal “coordinará” con la Dirección de Migraciones “la actualización sistemática y permanente de los registros de aptitud migratoria en lo referente a los pedidos de captura nacionales e internacionales”.

El Decreto también dispone la creación de Centros de Frontera “que abarcarán los complejos fronterizos de control migratorio, aduanero, fitozoosanitarios y de servicios complementarios, ubicados en las inmediaciones de los respectivos pasos internacionales”.

En ese marco, se declaran Centros de Frontera a los pasos internacionales Concordia-Salto, que limita con Uruguay; los fronterizos con Brasil Paso de los Libres-Uruguayana, Santo Tome-Sao Borja e Iguazú-Foz do Iguazú; Posadas-Encarnación, que limita con Paraguay; y los fronterizos con la República de Chile San Francisco, Pircas Negras, Agua Negra, Cristo Redentor, Pehuenche, Pino Hachado, Cardenal Samoré, Integración Austral y San Sebastián.

La nueva comisión estará integrada, con carácter “ad honorem”, por las siguientes autoridades, quienes podrán actuar por sí o a través de un representante: secretario de Fronteras del Ministerio de Seguridad, secretario de Relaciones Exteriores de la Cancillería, secretario de Obras Públicas y secretario de Interior del Ministerio del Interior, secretario de Gestión de Transporte del Ministerio de Transporte, director general de Aduanas y director nacional de Migraciones y titular del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agropecuaria (Senasa).

También serán parte del flamante organismo migratorio el director nacional de Gendarmería Nacional, el prefecto nacional naval de la Prefectura Naval, el jefe de la Policía Federal y el director nacional del Registro, Fiscalización y Sanidad de Fronteras del Ministerio de Salud.

La duda es si una mayor rigurosidad en esta tarea provocará más demoras en los pasos, o la coordinación permitirá realizar obras e inversiones para resolver los dos problemas: el ingreso de delincuentes desde el exterior y acelerar el paso Argentina-Chile/Chile-Argentina, que, por momentos, es muy lento.

Fuente: Télam.