En vísperas de la celebración de la Navidad, un ícono de la Ciudad de San Juan, como lo es el Campanil de la Iglesia Catedral, luce su renovada silueta recortada sobre el cielo sanjuanino, a partir de la importante obra de refuncionalización al que ha sido sometido.
El gobernador Sergio Uñac, junto al intendente capitalino, Franco Aranda, fueron los encargados de inaugurar los trabajos llevados a cabo por la Municipalidad de la Ciudad San Juan.
El acto congregó además a los ministros de Infraestructura y Servicios Públicos, Julio Ortiz Andino; de Hacienda y Finanzas, Roberto Gattoni; el secretario de Ambiente y Desarrollo Sustentable, Raúl Tello, concejales y funcionarios de la comuna, invitados especiales y público en general.
El gobernador Uñac expresó que era lindo poder vivir nuevamente la aventura de mirar un San Juan desde la modernidad, con cada uno de los desafíos que ha generado la construcción en la provincia.
Más adelante, el primer mandatario indicó que las ciudades tienen la obligación de poner en valor de manera permanente estos íconos arquitectónicos que hacen a la identidad de los pueblos.
Es un hecho más que conocido, apuntó el mandatario, “que San Juan ha tenido una fuerte presencia de turistas del país y del extranjeros en este año, y nada mejor que poder mostrarles a los visitantes lo más notable que tiene la provincia”.
La primera autoridad provincial agradeció y felicitó al intente Aranda por la obra concretada y destacó que con funcionarios como él, en los departamentos, resulta fácil la conducción de la provincia
En otro pasaje de su saludo Uñac enfatizó que los sanjuaninos tenemos motivos para celebrar y debemos estar orgullosos de lo que hemos construido, fruto del esfuerzo y la confluencia de los distintos sectores de la sociedad.
Para concluir, el gobernador expresó sus deseos de felicidad con motivo de las próximas celebraciones de Navidad y Año Nuevo.
En representación de los vecinos habló Juan Carlos Bataller que brindó detalles históricos del Campanil que flanquea a la Catedral.
El intendente Aranda por su parte dijo que cuando se piensa en la Capital, lo primero que se viene a la mente de los sanjuaninos es el Campanil y por eso creyó importante llevar adelante su recuperación, porque además es parte del patrimonio de la Ciudad.
El jefe comunal hizo referencia a parte de los trabajos efectuados como el reemplazo del ascensor, para que los visitantes puedan visitar el mirador con mayor seguridad y comodidad; se tecnificó el reloj y se recuperó el sonido del carrillón.
Aranda agradeció al gobernador Uñac su apoyo material y también moral cuando se decidió a encarar la remodelación del Campanil y además destacó la colaboración del Arzobispado de San Juan de Cuyo.
Trabajos realizados
El Campanil, símbolo de la reconstrucción de San Juan luego del terremoto de 1944, se levantó en el corazón de la ciudad para transformarse en el principal mirador de la provincia desde el 24 de diciembre de 1962, día de su inauguración.
El paso del tiempo fue deteriorando, tanto la estructura interna como externa de la torre de 51 metros de altura, de igual manera que dejó de funcionar el reloj y el carrillón que, con su sonido de campanas, marcaba el curso de las horas.
El intendente Aranda incluyó en su plan de obras la remodelación del Campanil que, puesto nuevamente en valor, será un atractivo más para el turismo.
La remodelación de la construcción de cumplió en distintas etapas y abarcó varios aspectos como la consolidación estructural de escalones y cierre superior y aberturas. Colocación de perfiles metálicos tipo “C” para consolidación de escalones. Colocación de marcos en ventanas con tela metálica anti aves.
En el sector del mirador, que se eleva a 33 metros, se reemplazaron las rejas frontales por paneles de vidrios laminados en paños fijos con estructuras metálicas y de aluminio. También se colocaron en las puertas de nuevos vidrios de seguridad.
Los trabajos incluyeron la renovación completa del sistema eléctrico incluida la iluminación de escalera y pasillos
En las tareas de armado y puesta a punto de los aparatos eléctricos participaron los alumnos de la Escuela Rogelio Boero a través del convenio de aprendizaje y capacitación firmado con el Municipio.
El reloj mecánico tan característico de la torre fue reemplazado por un sistema electrónico mediante un PLC, con módulo dedicado de reloj de tiempo real, más un sistema de moto reductor para el manejo de las agujas del reloj; de esta forma permite tener un sistema muy moderno, preciso y confiable.
Se restauró a nuevo el sistema de iluminación de los “puntos de hora” del reloj externo logrando mayor visibilidad del mismo.
El plan incluyó un nuevo ascensor con capacidad para seis personas y la pintura general del Campanil.
En el acceso se construyó una rampa para facilitar el desplazamiento de personas con discapacidad motriz, de materiales idénticos a los existentes sin modificar la estética del edificio.
La reparación y puesta en marcha del antiguo sistema de sonido fue otra de las tareas ejecutadas en la estructura.
