A seis meses de los Juegos anteriores, se duplicaron las medallas ganadas.
Pasaron los XXV Juegos Binacionales Cristo Redentor de Valparaíso, una experiencia inolvidable para nuestros jóvenes deportistas que, además de competir, pueden compartir con sus compañeros, hacer nuevos amigos de otras provincias o de las regiones de Chile. Para muchos, significó la primera vez en salir de la provincia o del país y vivir una semana fuera de San Juan.
En el aspecto deportivo, si analizamos fríamente los números, deberíamos decir que fue una incursión positiva, ya que pasaron apenas seis meses de la edición de San Luis, donde se consiguieron siete medallas y en esta ocasión se duplicaron, con catorce medallas obtenidas.
Si no hacemos tanto hincapié en los números y sí en el desempeño de nuestros deportistas, encontraremos algunas confirmaciones, otros que sorprendieron, algunos que consiguieron menos de lo que esperaban y otros que sabían que hay etapas de recambios y eso se siente a la hora de competir.
En atletismo, se consiguió una medalla (oro) por parte de Joaquín Ocampo en salto en alto, confirmando el excelente momento deportivo por el que atraviesa. Ésta es una de las disciplinas que otorga gran cantidad de medallas y donde otros equipos tienen la posibilidad de sumar fuerte. Sin dudas que el trabajo debe seguir siendo constante para lograr aumentar las chances de nuestros atletas, teniendo en cuenta las capacitaciones que hicieron nuestros entrenadores en los últimos meses.
En natación se sabía que el panorama era difícil, por lo mencionado en cuento al recambio generacional, sin embargo había una esperanza con el chico Martín Perrone, por sus condiciones atléticas y por la preparación que venía haciendo, inclusive fuera de la provincia. Finalmente, se cumplieron los presagios y Martín trajo a San Juan, nada menos que cuatro medallas (2 de oro, 1 de plata y una de bronce).
El ciclismo, si bien pasa por un momento similar al de la natación, cumplió con su cuota de medallas y le dio a la provincia 2 de plata y una de bronce, destacando a Lautaro Naveda que consiguió una de plata en forma individual y otra plateada en equipo.
Se sabe que para estos Juegos, en etapa de preparación, en casi todos los deportes se citaron a varios chicos de 15 años en adelante para que sumaran experiencia y tenerlos en cuenta para futuras competencias.
El hockey sobre patines, por ser San Juan cuna mundial de este deporte, se preparó para traer medallas de oro en ambas ramas. Se hizo una fase de grupos lógica y ambas selecciones llegaron a la final, cayendo en las dos finales ante Mendoza. Esta fue la despedida de esta disciplina dentro de los Juegos Binacionales.
En básquet se vive un proceso muy importante, puesto que el seleccionado masculino viene rindiendo de gran modo en los últimos torneos y en Valparaíso no fue la excepción, ya que llegó a la final, donde cayó ante Córdoba, pero –sin dudas- que se hizo un gran torneo.
Por el lado de las chicas, San Juan está algunos pasos atrás en cuanto al nivel de juego y los resultados confirmaron lo mencionado. Se pretendía un sexto puesto o al menos repetir el séptimo de 2022, pero no fue posible. Es necesario seguir trabajando con las divisiones inferiores y preparar un equipo que pueda, al menos jugar dos Binacionales consecutivos. Entendemos que hay una base que dejan estos juegos, que se podrán aprovechar en Mendoza 2024.
El taekwondo, hasta 2021 era uno de esos deportes que se sabía, de antemano, que San Juan no tenía demasiadas posibilidades. El notable trabajo realizado por profesores de Barreal y Capital fue posicionando a San Juan, que comenzó a ser tenido en cuenta. El año pasado, en San Luis, se obtuvieron las dos primeras medallas en el historial de los Juegos y en la edición que acaba de finalizar, fueron –nuevamente- dos preseas para la provincia: Marisela Cortéz y Jesús Rojas (ambos barrealinos). Celeste Ángel y Felipe Gutiérrez quedaron a las puertas, con un cuarto puesto de cada uno.
En vóley, una vez más, un equipo dirigido por el profesor Roberto Alós estuvo jugando una instancia final; esta vez, se perdió ante Córdoba en semi, para luego ganar la medalla de bronce venciendo a Valparaíso.
El vóley femenino, que tiene un gran potencial, no ha sido acompañado por los resultados, pero con la seguridad de transitar el camino correcto.
El balonmano o handball sigue creciendo en San Juan. Hasta hace poco tiempo atrás, nuestras selecciones aparecían sin demasiadas chances ante rivales de mayor fuste, sin embargo, ambas selecciones hicieron una preparación excelente, tanto de las chicas, con Anahí Balmaceda de entrenadora, como los varones, con Pablo Nale al frente.
Eran las mujeres las que llegaron a Valparaíso con mayores expectativas, sin embargo, los resultados no acompañaron en el inicio y en este tipo de torneo, cortos, luego es difícil remontar sin depender de los demás. San Juan terminó 6°.
Fueron los varones los que no empezaron bien, pero compusieron las cosas en la marcha, hasta llegar a jugar semifinales y luego por la medalla de bronce que, finalmente, sería para Metropolitana, que venció en tiempo suplementario.
El tenis venía de obtener una medalla en San Luis con el equipo femenino, sin embargo, este año no se mantuvo el nivel, cayendo al sexto puesto en el clasificador final y –por el contrario- los chicos que no venían de un buen torneo en la ciudad puntana, lograron meterse en semifinales, cayendo por la medalla de bronce ante Metropolitana, obteniendo un buen 4° puesto en el torneo.
Finalmente, el tenis de mesa sigue siendo una enorme deuda pendiente para San Juan. A la escasez de jugadores aptos para estos compromisos, debemos sumar la casi nula competencia oficial, por lo que nuestros representantes debieron viajar a Mendoza para tomar ritmo. Se sigue trabajando para atraer la atención de los chicos hacia este deporte y elevar el nivel del tenis de mesa sanjuanino.