La aduana chilena se vio colmada en su capacidad. Es que durante el fin de semana largo para los argentinos, el complejo Los Libertadores operó al máximo. Para descomprimir el tránsito, se dispuso cortes transitorios en alta montaña.
Este fin de semana cruzaron cerca de 20 mil personas a Chile para disfrutar del fin de semana largo. De acuerdo a los números que maneja Gendarmería Nacional, salieron por Libertadores 18.729 personas. Esto provocó que el viernes y el sábado las esperas para cruzar a Chile fueran de hasta 8 horas.
Durante la semana pasada la congestión en alta montaña fue total, y hubo turistas que llegaron a esperar más de 15 horas para cruzar la frontera. En esa ocasión, el paso había permanecido cerrado durante dos días debido a las condiciones climáticas en la zona.
En primera persona: 17 horas varado en Horcones
Un lector de MDZonline (Mendoza) contó la odisea que tuvo que pasar mientras esperaba toda la noche ser atendido por Aduana. El colapso del complejo Horcones fue total durante la madrugada del sábado, y a pesar de que las autoridades del paso Cristo Redentor aseguraron que las esperas actuales para entrar a la Argentina son de seis horas, hay personas que pasaron más de 16 horas haciendo fila.
Este es el caso de Marcelo, quien se comunicó con MDZ para contar la odisea que vivió durante la noche, y que todavía no termina: “En este momento llevo 16.30 horas esperando. La cola de autos empezaba a 5 km de los baños y de los kioscos, y para comprar tenés que hacer dos horas de cola. Tengo 30 autos adelante, y se demoran por lo menos 8 minutos con cada trámite. Lo más preocupante es que entre los varados hay muchas familias con niños pequeños”.
Durante la madrugada -en la que la temperatura llegó a los -4º- hubo muchísimas quejas porque los kioscos no estuvieron abiertos, por lo que las miles de personas varadas no podía comprar ni agua ni comida.
Autoridades argentinas indicaron que un contingente de 30 colectivos con 1500 personas fue el causante del colapso.
Recomendaciones para conducir en alta montaña
En pendientes y curvas:
-Otorgar prioridad al conductor que circula en dirección ascendente. Ante descensos pronunciados siempre es preferible utilizar un cambio bajo (primera o segunda) si la situación lo requiere (caso de la zona de caracoles).
-Accionar la bocina durante el día y hacer cambio de luces altas a la noche, si se advierte que se trata de curvas y lomas cerradas que impidan la visibilidad.
-Si tuvieses que detenerte por un caso de -fuerza mayor, hacerlo lo más lejos de la banquina. No te detengas en curvas o lugares con escasa visibilidad o que interrumpan la circulación.
-Si el vehículo está estacionado en pendiente, dejarlo con el cambio colocado, el freno de mano levantado y calzado con piedras en las ruedas traseras.
Camiones en la ruta:
Ante la situación de encontrarnos con camiones que circulan a una velocidad reducida (más de lo normal) se recomienda a los automovilistas extremar las precauciones.
Los especialistas coinciden en que existe aún una gran confusión sobre las señales con las luces de giro que nos pueda hacer el vehículo que nos antecedes. Por eso recalcan no dejarse llevar por lo que nos indica el camión que circula delante, sino tomar uno las propias conclusiones.
Internacionalmente el giro a la derecha significa que va a hacer una maniobra en ese sentido, y el giro a la izquierda puesto de forma breve indicaría que el conductor del camión no percibe vehículos que circulan de frente. Pero la recomendación de expertos es que uno mismo haga estas verificaciones.
Fuente: MDZ online (Mendoza).