Un empresario argentino murió este martes en el lado chileno del Paso de Agua Negra, tras descompensarse luego de cambiar una rueda pinchada de su vehículo. Identificado como Roberto Daniel Provoost (59 años), se encontraba viajando desde San Juan hasta el país limítrofe.

Se cree que el hombre advirtió una pinchadura en la rueda de su Ford Ranger Raptor, por lo que comenzó a cambiarla, pero más tarde terminó desvaneciéndose junto a la camioneta. Falleció poco después del incidente.

El sitio donde se produjo el deceso une la localidad sanjuanina de Las Flores, Departamento Iglesia, con el poblado de Huanta, en el Valle de Elqui, Chile. Se cree que Provoost habría sido afectado por la altura, ya que este paso internacional se encuentra a 4.780 metros sobre el nivel de mar.

De acuerdo con información del medio MDZ Online, el hecho ocurrió en el km 220 de la ruta CH-41, en la aldea chilena de Infiernillo y se aguardan los resultados de la autopsia. La fiscal Camila Paz Guajardo es la encargada de la investigación para determinar el motivo de su muerte.

Habilitado de lunes a domingos de 07:00 horas a 17:00 horas, el paso internacional es permanente pero se mantiene inhabilitado la mayor parte del año “por la gran cantidad de precipitaciones níveas” producidas en la zona, según información del sitio web del Ministerio del Interior.

Al intentar reconstruir el lamentable suceso, los efectivos del servicio de emergencia estimaron que Provoost buscaba la rueda de auxilio de su camioneta, con el esfuerzo físico que esa tarea demanda. En medio de esa situación habría sufrido de modo repentino la descompensación que lo dejó tendido en el suelo, a un costado del rodado. Cuando intentaron asistirlo, el empresario se encontraba sin signos vitales.

La primera hipótesis de lo sucedido da cuenta de posibles efectos de lo que se conoce como mal agudo de montaña, mal de altura o puna. Este malestar físico se produce por la dificultad que encuentra el cuerpo para adaptarse a la baja presión de oxígeno en lugares de mucha altitud sobre el nivel del mar. Cuando eso ocurre las personas suelen sentir problemas para respirar, fuertes dolores de cabeza y nauseas. En la mayoría de los casos los síntomas son moderados, pero pueden provocar la muerte.