El presidente de Chile, Sebastián Piñera, nombró a Alfredo Moreno como nuevo ministro de Obras Públicas, en reemplazo de Juan Andrés Fontaine, en el marco de un cambio en el tren Ejecutivo que incluyó además modificaciones en otros cinco ministerios.
“Estoy muy contento de estar en el Ministerio de Obras Públicas para cumplir con el encargo que me ha hecho el Presidente Sebastián Piñera que es trabajar intensamente con la gente del MOP, con el Subsecretario, con todos los técnicos y todo personal del ministerio, para ayudar a crear la infraestructura para el desarrollo de Chile”, informó el nuevo ministro, quien es Ingeniero Civil Industrial de la Pontificia Universidad Católica y Master in Business Administration en la Universidad de Chicago.
El Secretario de Estado destacó que “nuestra aspiración es que Chile sea un país desarrollado, que alcance los niveles de desarrollo que todos esperamos y para eso requiere una infraestructura que logre soportar eso. Esto significa caminos, puentes, aeropuertos, puertos y también tiene que ver con la calidad de vida de las personas que depende de poder movilizarse en tramos de tiempo cortos, el poder viajar, el poder abastecerse con costos de logística bajos y todo esto tiene que ver con la tarea que realiza el MOP creando esa infraestructura que es necesaria”.
En los primeros diez días de su gestión, el actual titular de Obras Públicas y ex ministro de Desarrollo Social, realizó una visita a la región de Coquimbo para participar en una inspección a los trabajos de señalética caminera de la ruta D-41 y obras de mitigación en el aeropuerto La Serena, de cara a lo que será el eclipse de Sol.
Allí, consultado por Diario La Región de Coquimbo, analizó los desafíos que vienen. Entre ellos, el Túnel de Agua Negra:
“Conozco muy bien esto, fui canciller durante cuatro años así que trabajamos con Argentina en todo lo que tiene que ver con la integración, donde el Túnel Agua Negra es una expresión más del deseo y del beneficio que pueden tener los dos países de integrarse, ya sea para temas de personas, turismo y también en materia productiva, utilización de los puertos chilenos… en fin hay mucho que ganar al trabajar en conjunto, y este es el trabajo que se ha venido haciendo”, expuso el ministro.
Particularmente sobre la mega-obra binacional, Moreno analizó que: “El Túnel de Agua Negra tiene una realidad distinta de las que tienen otros proyectos de infraestructura, es binacional, y por lo tanto quien dirige esto es una organización que se creó para ello, la Ebitan, donde en términos técnicos pero con la participación de los dos países se van resolviendo los distintos problemas que se van presentando. Lo tercero que hay que tener en consideración, es que es una obra de gran magnitud y gran complejidad técnica, tiene varios kilómetros de túneles, se encuentra a bastante altura, tiene problema geológicos y de agua, y requiere de los estudios correspondientes, porque cuando se empieza a hacer la obra, hay que llegar al otro lado e incurrir en los costos”.
Además, hizo referencia a que desde el lado chileno se conformó el equipo de expertos en túneles, compuesto por 5 personas, que ha realizado estudios al respecto: “Lo que interesa saber es cuánto costaría hacer ese túnel, qué problemas habría que resolver y las precauciones que hay que tomar, y luego esto hay que confrontarlo con lo que digan los argentinos”.
La autoridad comentó que está a la espera de citación de EBITAN para que en los próximos meses se desarrolle una la discusión técnica.
