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“El proyecto Xumek no es un proyecto de vino sino de calidad de vida”

“El proyecto Xumek no es un proyecto de vino sino de calidad de vida”

Ezequiel Eskenazi y el enólogo Daniel Ekkert relatan cómo los vinos de alta calidad Xumek reflejan el “terruño” del Valle de Zonda.

Hace casi dos décadas, y después de recorrer innumerables y diversas geografías, Ezequiel Eskenazi eligió el Valle de Zonda, en San Juan, debido a la belleza natural y cruda del lugar. Allí, comenzó el desafío de hacer crecer las viñas que dieron origen a Xumek (que significa “sol” en huarpe). El gran proyecto es crear vinos de alta calidad que reflejen el “terruño” de las tres fincas que componen el lugar: Santa Sylvia, con viñedos a 860 msnm., se ubica en el valle con suelos aluvionales con vides de más de veinte años; Finca La Leona, sobre la ladera de la sierra chica, a 950 msnm., con suelos muy compactos de abundante carga mineral, gran luminosidad, donde está proyectada la cava, bodega y actualmente está emplazada la obra de arte popularmente denominada “ballena” con aspecto de fósil, realizada por el consagrado artista argentino Adrián Villar Rojas; y, por último, Finca La Ciénaga, a 1.430 metros, definiéndola como “una reserva natural con suelos franco arenosos, gran cantidad de canto rodado y mineral, que cuenta con  vertientes naturales de agua a 1.500 mts., para el riego de  60 hectáreas de producción por goteo. Aquí, los vientos permanentes del sector sur garantizan la sanidad y contribuyen para obtener una amplitud térmica única. Es sin dudas el viñedo más prometedor por sus condiciones naturales, sus temperaturas promedio y el reconocimiento de los expertos en cuanto a suelos”, explican Ezequiel Eskenazi y su enólogo, Daniel Ekkert, quien asegura que el lugar con condiciones únicas para la vid, le permiten generar vinos muy interesantes, originales y con una personalidad y carácter que reflejan el terruño.

Pero el concepto de todo esto es filosófico, trasciende el resultado final de la botella de vino. “Desde que comenzamos a la fecha teníamos en mente que no queríamos hacer solamente vino, queríamos hacer un producto que sirva para festejar, para momentos importantes de nuestra vida. No son vinos masivos, no se encuentran en góndolas, sólo en algún restaurante, hotel o vinoteca en particular. Es decir que no son cotidianos ni para todos los días”, destaca el enólogo.

Es que el proyecto Xumek no es un proyecto de vino sino de calidad de vida. “San Juan también tiene cosas interesantes y lindas para contar. Apostamos a San Juan y a la industria del vino, y disfrutamos viendo que una botella de nuestro vino se abre para festejar. Los tres vinos tradicionales que trabajamos son Chardonnay, Malbec y Syrah. Lo que los caracteriza es que se hacen sin la influencia de la madera. Es para personalizar al vino de una manera diferente, para poner lo que el terroir, es decir, el lugar donde se cultiva, pueda brindarnos. Xumek trabaja fuertemente en mostrar la naturaleza del lugar. Estamos todos enamorados de lo que estamos haciendo, porque esto no es un proyecto industrial, no nos importa vender para que se sienten a tomar vino, queremos sentarnos porque tuvimos el mejor día y queremos brindar. Además, lo nuestro es un proyecto macro donde compartimos arte, vino, naturaleza y turismo”, relata Ekkert, con la emoción de poesía.

En Xumek hay dos condimentos más que acompañan al vino: la fauna de la región y el arte. ¿Cómo se articulan y porqué están tan presentes en la bodega?

“Aquí estamos comprometidos en respetar el hábitat natural de los animales propios del Valle de Zonda, los cuales además eran la base alimenticia de los pueblos Huarpes. Teniendo esto muy presente, existen dos proyectos de cría de guanacos y ñandúes que se mueven en total libertad, por lo que es común encontrarse con zorros, pumas, guanacos, cóndores y águilas coronadas. Y en cuanto al arte, nuestra idea es convocar a grandes artistas plásticos argentinos y hacer dentro del viñedo una muestra escultórica que denominaremos “Arte Bestial Argentino”. De hecho, ya existe desde hace unos años una escultura gigante de una gran ballena que se integra perfectamente al paisaje de montaña. La conjunción de estos tres aspectos, vino, conservación y arte de alguna manera emula nuestros tres varietales, ya que pensamos al vino como un producto vivo que evoluciona con el tiempo como el gusto de sus consumidores”, expresa Eskenazi y agrega: “Nuestro objetivo es instalar el Valle de Zonda en San Juan como una zona de producción de uvas de calidad, donde nosotros tenemos tres viñedos a distintas alturas que poseen condiciones agroecológicas únicas. Considero que los vinos de terroir son también un estilo de vida y sabemos que nuestros vinos transmiten un carácter y una personalidad distintiva fruto de este lugar único”.

El Terroir del Valle de Zonda

El Valle de Zonda es una zona privilegiada y de un microclima único. Ubicado en el centro-sur de la provincia de San Juan y emplazado en un valle sinuoso de la Pre-cordillera de los Andes, cuenta con un clima semidesértico con precipitaciones de 100 mm anuales. Su amplitud térmica, acompañada del viento zonda suave y permanente, hacen que la sanidad del viñedo sea excelente y dé como resultado uvas con gran potencial enológico. Los viñedos que integran esta diversidad de “terroirs” permiten al enólogo una amplia gama de combinaciones enológicas. Zonda fue Declarada por el INV (Instituto Nacional de Vitivinicultura) Identificación Geografica – IG Zonda – en atención a sus atributos para producción de uvas de alta calidad.

Finca Santa Sylvia

Emplazada a una altura variable de 750 – 850 msnm, esta finca cuenta con 170 has. de uvas Malbec, Syrah, Chardonnay, Pinot Gris y Cabernet Franc. Los viñedos crecen con vigor en este suelo pedregoso y esquelético. La alta heliofanía y el régimen de lluvias de 110 mm anuales, junto al viento Zonda, favorecen la alta sanidad de los viñedos.

Finca La Leona

Recostada en la falda de la Sierra Chica de Zonda, esta finca cuenta con características propias. Emplazada a una altura que varía entre 900 – 980 metros, con suelo aluvional, pedregoso y con alta exposición solar complementaria desde el Oeste, produce uvas Malbec, Syrah y Pinot Gris que maduran con una particular tipicidad.

Finca La Ciénaga

En el sur del Valle de Zonda, a 1400 metros de altura y con vertientes naturales de agua de deshielo, crecen las cepas del mejor Malbec, Syrah y Pinot Noir. Aquí la amplitud térmica más pronunciada junto al viento fresco del Sur, permiten cosechar estas uvas durante el mes de marzo. La libertad enológica de contar con uvas cosechadas en tres “terroirs” dan a los vinos Xumek características únicas.

Los vinos

Un blanco que es un fiel reflejo del sol del valle combinado con una vibrante frescura de nuestros viñedos de altura. De color amarillo verdoso brillante, tiene intensos aromas a durazno blanco y manzana, en sintonía con notas cítricas y florales de Azahar. Es un vino amplio en boca, de paso ágil y agradable con sabores a pera y miel. Un ejemplar típico de la variedad, exponente honesto de las bondades del Valle de Zonda y los distintos terroirs.

Una variedad que se expresa de gran forma en San Juan, encontrando en el Valle de Zonda una tipicidad y calidad superlativas. De color rojo rubí intenso y matices violáceos, tiene aromas a higos y mermelada de arándanos, junto con notas de pimienta negra y cuero. Es un vino de buen volumen en boca, con intensos sabores a fruta y toda la potencia del terroir de Zonda. Un Syrah joven y frutado, que posee tipicidad y complejidad.

La uva insignia de Argentina encuentra en el Valle de Zonda una expresión única y personal. De color rojo violáceo intenso, en nariz explotan los aromas a ciruela negra, acompañados por toques florales de violetas y una particular nota de jarilla típica del terroir. Es un vino de entrada amable y gran expresión de sabores a moras y tabaco, excelente frescura y un delicado final mineral. Un excelente Malbec, fiel representante de Argentina y específicamente de un terroir extremo como Zonda.

Las etiquetas de los vinos fueron elaboradas por el artista argentino Esteban Díaz Mathe.

 

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